miércoles, 13 de abril de 2011

Seamos LIBRES y lo demás no importa NADA


Publicado por conal_cochran
13 de abril de 2011

Seamos LIBRES y lo demás no importa NADA


La Constitución Nacional establece, en su Artículo 14, que todos los habitantes de la Nación gozamos, entre otros derechos, del de “entrar, permanecer, transitar y salir del territorio argentino”.
Y en su Artículo 16, que “la Nación Argentina no admite prerrogativas de sangre, ni de nacimiento: no hay en ella fueros personales ni títulos de nobleza. Todos sus habitantes son iguales ante la ley”.
En otro foro, uno de los debatientes me criticó porque, en mi artículo en el que hice explícito mi apoyo a Cristian U, cité autores y temas sabidos “desde la escuela primaria”.
Entre los que incluyó la Constitución.
Como si fuese lo suficientemente conocida.
Y, por sobre todo, escrupulosamente cumplida.
Sea lo suficientemente conocida o no, sea lo suficientemente cumplida o no; me parece oportuno que la repasemos juntos.
Tenemos derecho a movernos CON LIBERTAD en nuestro territorio.
Podemos ir donde nosotros lo decidamos.
Pero, también, podemos tomar la decisión de NO HACERLO.
Porque se trata de un “derecho de”.
Podemos HACERLO o NO.
Uno de los lugares al que podemos decidir IR o NO, es a un programa de televisión.
Sobre todo cuando nos invitan, en forma directa o indirecta.
El pretendido anfitrión tiene que ACEPTAR que le digamos SÍ o NO.
Le guste, o no, la respuesta recibida.


II°
La Nación Argentina no admite prerrogativas de sangre, ni de nacimiento.
No hay en ella fueros personales ni títulos de nobleza.
Sin embargo, hay conductores televisivos que se comportan como si ello NO fuera así.
Como si fuesen semidioses, todopoderosos, sentados en un trono.
Siendo un trono carácter distintivo de una monarquía o de un imperio.
No de una República.
Ellos sienten que pueden “tocar” a cualquiera.
Pero, si se les responde, reaccionan en forma virulenta.
Se sienten afectados en “fueros” que NADIE les concedió.
Son capaces hasta de expresar que se vulnera la LIBERTAD DE PRENSA.
Como si “libertad de prensa” fuese sinónimo de SU OPINIÓN y NO la de otros.
Pero ocurre que, si SÓLO ELLOS pueden “moldear” la realidad a su gusto, y los demás NO pueden resistirse, no estaríamos frente a un ejemplo de “libertad de prensa”.
Sino ante una manifestación palmaria de DICTADURA DE PRENSA.
En la que un simple “conductor” se transformaría en un “duce”.
En un “führer” mediático.

III°)
Todos conocemos a Jorge Rial.
El Hombre Honorable. Como Bruto. Uno de los asesinos de Julio César, así reconocido por Marco Antonio en la célebre obra de William Shakespeare.
El Hombre Honorable que conduce “Intrusos”.
El Hombre Honorable que conduce, asimismo, las ediciones de “Gran Hermano” desde 2007.
Programa al que, años antes, había repudiado.
Considerándolo un “experimento nazi”.
Ante la evidencia presentada en YouTube, quedan dos opciones:
Una, que “Gran Hermano” haya dejado de ser un “experimento nazi” para poder contratar a Jorge Rial, el Hombre Honorable (como Bruto).
Y transformarlo en una experiencia democrática digna de elogio.
Otra, que “Gran Hermano” se trate, efectivamente, de “un experimento nazi”.
Y que la persona más indicada para conducirlo, por su condición de tal, sea Jorge Rial, el Hombre Honorable (como Bruto).
Poniéndome en el papel de Marco Antonio, me veo forzado a considerar, como única válida, la primera posibilidad.
Un Hombre Honorable (como Bruto), no puede ser asociado con un jerarca nazi sonriente que le da la bienvenida a las víctimas que llegan a un campo de concentración. 
Supongo que todos coincidirán conmigo (¿o no?).

IV°
Acá voy a pedir la ayuda de todos ustedes, porque yo NO VEO Telefe ni América TV.
Porque, justa o injustamente, las asocio con Marco Alessio, el extraterrestre de “El Fin empezó Ayer”, experto en generar HIPNOSIS COLECTIVA para apoderarse de la tierra y las mentes de sus habitantes.
Y, como no quiero ser parte de ese universo hipnotizado, pongo el televisor en TCM.
Porque me divierte más ver a Peter Ustinov en “Qvo Vadis”, protagonizando a Nerón.
 Sabiendo que se trata de una ficción que llena el alma.
Ha trascendido que existe “un problema” con Mari, la novia de Cristian U.
Y es que, al parecer, ha decidido NO ASISTIR al programa “Intrusos”.
Por los motivos que ella considere.
Y que puede explicarlos, o no.
Según ella, con todo derecho, lo decida.
“Intrusos” es conducido, como quedó expresado con anterioridad, por el Hombre Honorable (como Bruto).
La negativa de Mari, aparentemente, habría molestado mucho al referido.
Al punto tal que la habría comenzado a atacar en forma sistemática.
Tanto a ella como a los seguidores de Cristian U.
Y al mismo participante del reality.
Sobre el que decidió poner la lupa.
Mediante la realización, por ejemplo, de una “encuesta” para verificar si el público lo percibía como “agresivo”.
A Cristian U, aclaro.
No al Hombre Honorable (como Bruto).
Que, según me cuentan, habría amenazado de muerte a Ricardo Fort.
Algo que, de ser cierto, reflejaría una carga de agresividad tan espantosa que le ha de ser muy difícil de controlar.
Al Hombre Honorable (como Bruto); no a Cristian U.
Vale la aclaración.
Debo decir que no me parece posible imaginar que un Hombre Honorable, conductor de un programa de altos valores morales y de claras convicciones democráticas, pueda presionar, por distintos medios, a alguien para que concurra a su programa.
Cual si se tratase de un niño caprichoso al que no le compraron algodón dulce a la salida del Zoológico.
Al precio de recurrir a los micrófonos y cámaras a su alcance para atacar a quien NI SIQUIERA tiene planeado asistir a su programa para defenderse.
Porque, de ser esto así, NO ESTARÍAMOS, ya, ante una persona respetuosa de la libertad de expresión.
ESTARÍAMOS ante un ser intolerante. Un DICTADOR DE PRENSA. Un “führer” mediático.
Algo que, estoy seguro, NO ES Jorge Rial. Un Hombre Honorable (como Bruto).
Por consiguiente, ASUMO que Mari tiene el sagrado e incuestionable derecho a tomar sus propias decisiones.
Sin presiones.
Sin chantajes.
Y si UNA de sus decisiones es la de NO ASISTIR al programa del Hombre Honorable (como Bruto), DEBE SERRESPETADA.
Como si cualquier otra persona (allegado a los participantes de Gran Hermano 2011 o quien fuere) recibiera invitación para concurrir a ese u otro programa.
A opinar, a dar su versión de los hechos; siempre que quiera.
NO a “comparecer”.
NO a “prestar declaración”.
NO a PAGAR PEAJE para evitar que su propia imagen, o la de alguien cercano, sea destrozada por medio de un accionar más propio de la STASI o del KGB que de un panel televisivo.
Como estoy seguro del compromiso democrático de Jorge Rial, el Hombre Honorable (como Bruto), no tengo dudas de que ACEPTARÁ, le guste o no, y respetuoso del disenso, que Mari NO VAYA a su programa PORQUE NO SE LE DÁ LAGANA.
Posición respetable, corra por cuenta de Mari o de cualquier otro.
En un país, como el nuestro, donde la Constitución nos garantiza el derecho de transitar.
Y, por añadidura, de NO IR a donde NO nos interese ir.
En un país, como el nuestro, donde la Constitución NO ACEPTA prerrogativas de sangre, ni de nacimiento.
En el que no hay fueros personales, ni títulos de nobleza.
Ser conductor de TV es SÓLO ESO.
Un trabajo COMO CUALQUIER OTRO.
NO es un título nobiliario para ser ostentado tanto por personas nobles como innobles.
A veces es más fácil decir SÍ que decir NO.
Se trata, pues, de un EJERCICIO RESPONSABLE de la libertad.
Que trae beneficios, algunas veces.
COSTOS, otras muchas.
Pero vale la pena vivirla.
Porque en la Argentina, como señala el Artículo 15 de nuestra muchas veces olvidada y maltratada Constitución, NO HAYESCLAVOS.
En lo que a mí respecta, NO seré esclavo.
Ejerceré mi libertad de NO VER ciertos programas.
Porque mi contribución al rating de los mismos me transformaría en cómplice de aquellos que pudieren ser ideólogos de un chantaje de lo más vulgar.
Aclaro que digo esto en términos abstractos.
Porque dudo que haya programas así.
Más allá de que muchos, por Twitter, me digan que, JUSTAMENTE ASÍ, es el programa del Hombre Honorable (como Bruto).
Cosa que yo ME RESISTO a creer.
Me preparo, entonces, a vivir en libertad.
Con sus costos y sus beneficios.
Como dijo el General José de San Martín, SEAMOS LIBRES.
Y lo demás no importa NADA.
Conal Cochran

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