Irritados ante una realidad irreversible, SE OLVIDAN de jugar
Este post pertenece a los grupos SI SE VA CRISTIAN U NO MIRAMOS MAS GH, '' LA BANDA DE CR U
Desde el preciso momento en que se produjo el regreso de Cristian U. a la casa, posibilidad PERFECTAMENTE LEGAL yLEGITIMADA POR EL VOTO DEL SETENTA Y CINCO POR CIENTO DEL PÚBLICO, los participantes eliminados y varios de los que aún continúan en el juego siguen perdiendo su tiempo alzando su voz contra la presunta “injusticia”. Otros, que se han acomodado a la situación, son severamente repudiados por el sólo hecho de intentar jugar (aunque no lo hagan del todo bien; pero, por lo menos, hacen un esfuerzo).
Con toda seguridad el día en que Jorge Rial procedió a explicarles a los participantes que creían que jamás volverían a ver a Cristian U. dentro de la casa que el público había votado por su regreso (y el de otros), se mantuvo una discusión de casi una hora con vistas a aumentar las mediciones de teleaudiencia. Pero lo cierto es que hubiese bastado con una simple explicación corta o con el reingreso de los cuatro favorecidos por el voto del público sin más trámite ni mayores explicaciones. Las puertas de la casa siempre están abiertas para el que desee irse. Los que firmaron el contrato para entrar allí lo saben perfectamente.
A partir de ese momento uno de los cruzados contra la presunta “injusticia” fue Emanuel. El mismo que hizo ostentación de actitudes CONTRARIAS AL REGLAMENTO en más de una oportunidad. Y que si no fue expulsado antes, fue por una decisión discrecional de Gran Hermano (que fue mucho más benigno que con participantes de ediciones anteriores). Otros, en un tono más o menos elevado, repitieron lo mismo. Loreley, en el colmo de la exageración, llegó a decir que se estaban "desangrando"allí dentro como si se tratase de la guerra de trincheras entre Francia y Alemania, entre 1914 y 1918.
Justo o “injusto”, lo cierto es que Cristian U. ESTÁ EN LA CASA. Es un hecho que, les guste o no les guste, lo tienen que asumir. No “perdió” porque se fue. Quienes están allí CONTINÚAN EN EL JUEGO hasta tanto no sean expulsados o abandonen (si es que no se somete a votación un posible retorno; facultad que el programa tiene). Toda otra interpretación deviene abstracta y se convierte en un palabrerío vacuo e insustancial.
Mientras los adversarios de Cristian U. siguen insistiendo en esto (al igual que los fans de los derrotados y por derrotar) SEOLVIDAN DE JUGAR. No saben qué hacer. No sorprenden con nada original. La única “estrategia” que se les ocurrió fue la en extremo inútil propuesta por Sebastián de Caro, aquel sobresaliente actor de “Montaña Rusa”. Emiliano llegó a decir que se aburre y no les queda mucho más que esperar quién se va por decisión de Cristian U. (omitiendo acordarse DEL PÚBLICO QUE VOTA y que a ellos les es siempre esquivo).
El problema, como dije en un artículo anterior, no es de Cristian U., de sus talibanes y/ público que simpatiza con él o de la producción. El problema SON ELLOS MISMOS, porque no saben jugar. Enojarse con el público y con la realidad no les servirá de nada. Y se terminarán amargando repitiendo todo el tiempo la catilinaria de “Fue injusto que Cristian haya regresado; los ganadores morales fuimos nosotros”. Negando otra vez los hechos tangibles y verificables y hasta la naturaleza misma del juego. Me hacen acordar a esa escena de “La Caída”, cuando Hitler pretende mover divisiones inexistentes. No podía concebir la derrota. Le resultaba insoportable. Y se irritaba con todo aquel que tuviese delante. Como les ocurre a quienes siguen indignándose ante hechos que ellos no pueden remediar.
Conal Cochran
No hay comentarios:
Publicar un comentario